¿Usas el factor solar adecuado para tu piel?

La llegada del calor trae consigo las ganas de tenderse al sol y conseguir una piel dorada lo antes posible. Hay que tener en cuenta que broncearse de manera inadecuada puede poner en peligro nuestra piel, llegando incluso a provocar cáncer de piel. Por ese motivo es importante conocer los rayos a los que nos debemos proteger: los rayos UVA (ultravioleta A) y los rayos UVB (ultravioleta B). Los diferentes tipos de piel tiene reacciones diversas ante los rayos solares, y cada una de ellas necesita un factor de protección distinto. ¿Quieres saber cuál es el adecuado para ti? ¡Sigue leyendo!

Hay que tener presente que no todos los fotoprotectores sirven para todas las personas, por ello antes de decantarse por uno es preciso conocer el fototipo de piel de cada uno. Es decir, el conjunto de características físicas con las que nace cada persona y que determinan su capacidad para broncearse. Existen 6 fototipos diferentes que se basan en el color del pelo y de la piel, así como la facilidad con que se queme o broncee la piel.

Fototipo 1: Son las más reactivas y sensibles al sol, y por tanto, requieren más protección. Son pieles muy blancas, con ojos claros y en muchas ocasiones con pecas. Además, casi siempre se queman y por tanto su factor de protección es entre 80 y 100.

Fototipo 2: Pieles sensibles con ojos claros o pardos y una piel blanca. Se queman fácilmente y raramente se broncean. Su factor de protección adecuado parte de 50, aunque un poco más alta no viene mal.

Fototipo 3: Se caracterizan por tener una piel clara que se broncea con facilidad. En muchas ocasiones suelen ser grasas con ojos marrones, castaños o rubios. Su factor adecuado debe ser mínimo de 30, para evitar problemas como manchas en la piel, ya que se queman menos y tienden al bronceado.

Fototipo 4: Pieles que se queman muy poco y en cambio se broncean con mucha facilidad. Los ojos, cabellos y pieles suelen ser oscuros y presentan una mayor tolerancia al sol. Su factor de protección es a partir del 20.

Fototipo 5: Tanto piel como ojos y cabellos son muy oscuros y su sensibilidad al sol es mucho menor. Esto conlleva a que pueden tener problemas de manchas si no usan una protección adecuada, que oscila entre los 15 y los 20.

Fototipo 6: Pieles negras que no se suelen quemar y que empiezan a enrojecerse a partir de los 45 minutos. A más sol, más se oscurecen. A pesar de ello, deben usar una protección de 15.

Con estas indicaciones esperamos que te resulte más fácil encontrar la protección adecuada a tu piel. Como siempre, el protector solar se recomienda aplicarlo 30 minutos antes de la exposición solar y renovarlo cada dos horas aproximadamente.