Di adiós a los piojos

Los pequeños de la casa son los que más suelen sufrir a estos pequeños insectos que tanto picor causan en la cabeza. Sobre todo con la vuelta al cole y a las actividades extraescolares, los niños pasan más tiempo en compañía de otros niños y el patio o las clases se convierten en el escenario perfecto para que los piojos hagan su aparición. Aunque en casa se mantenga unos hábitos correctos de limpieza, no se puede evitar el contagio de los piojos. Esta semana hablamos de estos pequeños insectos. ¡Seguid leyendo!

Es importante observar a los niños de vez en cuando para comprobar si existe riesgo de que los piojos habiten en sus cabezas. Si vemos que se rascan con frecuencia, sobre todo detrás de las orejas y nuca, debemos examinar con atención su cuero cabelludo para detectarlos. Es recomendable hacerlo ya que se puede confundir con la caspa, aunque esta cuesta es más fácil de despegar del pelo que los piojos.

¿Cómo tratar los piojos?

En caso de que los más pequeños se hayan contagiado de piojos, hay que tratarlo con un tratamiento pediculicida. Este tipo de tratamiento debe utilizarse cuando la cabeza está infestada, y no hacer uso de ellos como medida preventiva o como repelente. Pasos a seguir del tratamiento:

- aplicar la loción o espuma con el cabello seco, para así no diluir el producto.

- Con la yema de los dedos realizar un ligero masaje sobre el cuero cabelludo, incidiendo en la parte de las orejas y la nuca.

- Se recomienda seguir las instrucciones del fabricante respecto al uso de aplicación. Si la infestación es aguda, acabar el proceso lavando el pelo con un champú antiparasitario.

- Seguidamente, pasar una lendrera para arrastrar las liendres que no se hayan desprendido.

- Al finalizar no usar secadores de pelo, con aire caliente, porque inactivan el efecto insecticida residual.

Una vez efectuado el tratamiento, es aconsejable revisar a los siete días el cuero cabelludo de nuevo. Si reaparecen piojos vivos quiere decir que no quitamos todas las liendres y por ello, es recomendable realizar una segunda aplicación a la semana. Para evitar que el resto de la familia se contagie hay que lavar bien los utensilios capilares que se hayan usado en personas infestadas; lavar la ropa de cama y ducha con agua bien caliente y plancharlas y aspirar sofás, entre otras cosas. ¡Cualquier prevención es buena!

Curiosidades sobre el contagio de los piojos

Os dejamos algunos mitos sobre los piojos.

- No tienes más posibilidades de contagio por tener el cabello más largo ni por el tipo de peinado.

- La frecuencia de lavado tampoco será determinante.

- No es cierto que las niñas sean más propensas que los niños.

- No hay una edad máxima para tener piojos.

- No se contagian los piojos por contacto directo entre cabeza y cabeza, sino por el uso de los mismo productos capilares como gorros, peines, pinzas u otros objetos.